Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que no sabe de horas ni de tiempo.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que se entrega y nada espera a cambio.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que se complace en dar una y otra vez.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que es manso, sincero y benigno.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
en cuyo océano se disuelven las faltas.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que ríe con los que ríen
y llora con los que lloran.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
que es inagotable y siempre encuentra
tiempo para los demás.
Ayúdame, Señor, a reflejar Tu amor,
a ofrendar mi vida para que otros vivan.
Maria Fontaine